Aquí se alberga este singular restaurante mexicano, de nombre Nana Pancha. Un espacio donde la mexicana Ana Graciela, demuestra la gastronomía mexicana. Una vuelta a los orígenes es el punto de partida del diseño de este restaurante. El interiorismo es liderado por Iván Cotado y ha tomado referencia de dos ideas íntimamente relacionadas con la ciudad de Tampico de la cual proviene la propietaria y una mirada retrospectiva del diseño y la cultura mexicana. Por el otro, el recuerdo que la joven guarda de su nana pancha particular que, como ella misma cuenta «siempre supo encontrar el plato apropiado para cada estado de ánimo».
Todo ello se traslada a un interior lleno de colores vivos, madera, forja y vegetación. Dos pilares que recuerdan a los porches criollos soportados por esbeltos pilares de madera presiden la entrada original. El local se divide en dos zonas claramente diferenciadas. Una picante, canalla y dinámica, que alberga La Cantina; y otra más relajada y confortable, con La Hacienda. Situada a la entrada, una majestuosa barra moderna con un letrero grande. En contraste con el rojo picante de La Cantina, emerge el azul Caribe de La Hacienda. Con el barro y la madera muy presentes, el suelo de hormigón pulido y barro de la primera se convierte aquí en tarima de roble.
Agradecemos a: diariodesign.com
Sonia Sanchez says
realmente bonito, este lugar.